dejando el tema de las cuerdas a parte. hoy he tenido una conversación contigo sin el con, tumbado en la misma cama y entre las piernas una almohada. antes de ésto, otra conversación con otro contigo, pero esta vez, tu estabas y yo a medias. y seguro que nos hemos reído por compromiso. y no hace nada, se oía una conversación de calle, levanto un poco la cortina, con el brazo, para arriba y veo un taxi, parado delante de casa. el taxista, una camisa rosa y un reloj que brillaba cuando reflejaba la luz de la farola (y poco más he podido percibir).y a fin de cuentas, ¿de qué me sirve todo ésto? si acabo de decir que cuando yo llego, tú te vas y cuando yo me voy tú vienes con todas tus fuerzas.
...que sobrepasa mi cabeza y si miro hacia arriba veo la mancha o la neblina, o el humo o el tramado que descompone (esa trama que me sigue, igualita al rallador de parmesano que es capaz de descomponer la realidad, que sabe hacer trocitos y trocitos del todo). hace un poco de frío, es verdad, que por la noche es conveniente apagar la calefacción.
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